El flamenco, un baile temperamental

A tres siglos de existencia, el flamenco no deja de evolucionar. Esta expresión artística que surge en Andalucía por el cruce de diferentes culturas (árabe, judía y gitana) se ha diversificado en técnicas en música, canto y baile, en este último se integra como un instrumento más con las palmas, los silencios y el zapateado. “El flamenco es un arte local de nacimiento, pero de vocación global. Cualquiera que lo estudia puede aportar. Hay guitarristas y bailadores de todo el mundo que si aprenden y desarrollan la habilidad lo pueden hacer. No hay que nacer en Jerez para bailarlo”, comenta el periodista Manuel Moraga, conductor del programa Tiempo de Flamenco, una producción de la Radio Nacional de España. Su presencia en el país En México la presencia del arte flamenco, aunque es de nicho, despierta la curiosidad de profesionales y aficionados para estudiarlo y practicarlo. “Su historia en México data de finales del siglo XIX”, señala Maleni Romero, quien recientemente publicó su tesis de “Estudios Latinoameri