El origen de los guardianes

El origen de los guardianes es una historia sobre la falta de pertenencia en una sociedad. Sobre lo diferentes que somos entre nosotros. Con una tesis bastante simple, pero que nos toca, pues se construye a partir del sentimiento más elemental que hemos sufrido en la infancia e incluso cuando crecemos. Somos tantos que nos perdemos entre las masas, perdemos nuestra identidad. Nos volvemos realmente invisibles. Hoy en día nadie voltea a ver a los demás, ni siquiera notan si nos están atravesando. Jack Frost lo vive a diario, desde hace trescientos años. Él perdió sus memorias y recuerdos. Un día despertó a la luz de la luna en un paraíso gélido, y puede controlar el viento y el hielo. Pero los poderes otorgados por los entes naturales vienen con una desventaja: la invisibilidad. Nadie lo ve y nadie lo reconoce. Villanos Frost no es el único en su especie. El mundo se encuentra resguardado por varios guardianes. ¿Guardianes de qué? De los niños, de los sueños, los recuerdos felices de la inocencia, de los ojos