El recuerdo que abrió una herida

Durante años, la joven marroquí Asmae El Moudir se preguntó por qué no existían fotos de su infancia. Buscar respuestas la llevó a emprender un viaje por los recuerdos de su familia, pero también a las cicatrices ocultas de su país. Así nació La madre de todas las mentiras, un documental que combina la historia personal de El Moudir con los disturbios del pan en Casablanca en 1981, una protesta brutalmente reprimida que dejó decenas de muertos. En lugar de utilizar archivos oficiales o imágenes históricas, la directora y su padre recrearon con miniaturas de arcilla la calle de su infancia en el distrito de Sebata. En ese taller artesanal, vecinos, familiares, incluida su abuela Zahra (quien al principio se oponía a hablar) y amigos se enfrentaron a sus recuerdos y silencios. “Empecé esta película haciendo preguntas sobre mi familia, pero al ver un reportaje sobre el levantamiento del pan entendí que nuestras pequeñas historias eran parte de un trauma colectivo. Entonces supe que no podía contar solo mi histor