“Para comprender cómo alguien se convierte en un villano o en una representación del mal, es crucial preguntarnos cómo fue que llegó a ser así”, explica la actriz Cynthia Addai-Robinson, quien interpreta a la reina Miriel en El Señor de los Anillos: los Anillos de Poder. Cynthia reflexiona sobre la serie, ambientada en el vasto mundo de fantasía llamado Tierra Media, creado por J. R. R. Tolkien, donde coexisten razas como elfos, humanos, enanos y criaturas oscuras. Esta precuela de El Señor de los Anillos, que inicia segunda temporada, se sitúa miles de años antes, durante un periodo conocido como la Segunda Edad. La trama muestra la creación de los Anillos de Poder, objetos mágicos diseñados para controlar a los habitantes de la Tierra Media, lo que desencadena una encarnizada lucha entre el bien y el mal. La actriz, que da vida a la gobernante de un poderoso reino humano llamado Númenor, destaca el hecho de que la mayoría se plantea el mundo desde una postura del bien, algo que desafortunadamente cambia co
El Señor de los Anillos, de estreno
“Para comprender cómo alguien se convierte en un villano o en una representación del mal, es crucial preguntarnos cómo fue que llegó a ser así”, explica la actriz Cynthia Addai-Robinson, quien interpreta a la reina Miriel en El Señor de los Anillos: los Anillos de Poder. Cynthia reflexiona sobre la serie, ambientada en el vasto mundo de fantasía llamado Tierra Media, creado por J. R. R. Tolkien, donde coexisten razas como elfos, humanos, enanos y criaturas oscuras. Esta precuela de El Señor de los Anillos, que inicia segunda temporada, se sitúa miles de años antes, durante un periodo conocido como la Segunda Edad. La trama muestra la creación de los Anillos de Poder, objetos mágicos diseñados para controlar a los habitantes de la Tierra Media, lo que desencadena una encarnizada lucha entre el bien y el mal. La actriz, que da vida a la gobernante de un poderoso reino humano llamado Númenor, destaca el hecho de que la mayoría se plantea el mundo desde una postura del bien, algo que desafortunadamente cambia co