Francisco Martín se aleja de la política

En pleno año electoral, Francisco Martín Moreno planeaba cerrar su trilogía sobre el México que ha dejado el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, del que resultaron dos novelas políticas: Ladrón de esperanzas y México roto. Pero el autor de novelas históricas quiso alejarse de la “toxicidad” política y decidió escribir su primera obra de ficción pura: Dime que no es cierto (Alfaguara). Se trata de una historia cargada de obsesiones, venganzas, celos y ante todo de un deseo por saber de qué se trata todo esto de vivir y para qué vivimos. Moreno optó por contar la historia de un multimillonario que, en el hartazgo de la cotidianidad, sigue el consejo de un amigo y acude a consultar a una bruja, quien al leerle el tarot le dice: “Mijito, tu mujer te engaña con otro hombre”. Esa “revelación” vuelve loco a un hombre con poder económico, su vida da un vuelco y se convierte en un infierno de celos e inseguridad. “Me metí en el mundo de los celos, en el de las pasiones. Hay una venganza verdaderamente terrible en