LIBRO

Ana empieza a trabajar en Laboratorios Grau, una multinacional farmacéutica. Su jefe, Eric Grau, un hombre alto y atractivo al que todo el mundo llama “Iceman”, tiene fama de ser arrogante y despiadado, además de un auténtico depredador sexual. Al principio, la relación entre ambos es muy tensa, pero, poco a poco, la joven descubrirá que su implacable jefe no es el hombre de hielo que todos creen. ¿Podrá Ana resistirse al síndrome de Estocolmo que Eric despierta en ella? En Maldito síndrome de Estocolmo estamos siguiendo a dos personajes sumamente distintos entre sí, pero que de alguna forma terminan coincidiendo.  Laboratorios Grau es un conglomerado que tiene muchísimos empleados, que están divididos en “internos” y “externos”. Ana entra como consultora externa, así que le toca estar en la parte “oculta” de la empresa.  Eric Grau, conocido por muchos de sus empleados como “Iceman” (hombre de hielo), es un hombre atractivo, poderoso, que destila arrogancia. Muchos piensan que es despiadado y un depredador se