MODA

La trama en color miel y crema del suelo de la pasarela era sin duda un desafiante logo de Fendi, que ya llevaba muchas temporadas sin aparecer tan exageradamente. Pero podría haber sido otra cosa: los estampados geométricos que decoraban los elegantes abrigos de piel a modo de artesanales tableros de damas.   Algunos de los abrigos tenían dos ‘X’ en la cintura, como si quisieran dirigir la atención a esa zona. Karl lo expuso en un lenguaje más técnico: “En lugar de tener simplemente un fruncido, es una costura profunda fijada por una cruz para dar lugar a diferentes formas”, explicó. “Hay un doble hombro para crear un efecto gráfico, y las mangas salen de más abajo”.  La calidad del resultado no provenía sólo del trabajo técnico de diseñar, sino también del estudio de Fendi y su esfuerzo por materializar la inspiración de Karl en forma de estampados que emulaban la madera y la marquetería vienesa; con el añadido de no haber sido trabajados sobre una superficie plana como el suelo o una mesa, sino alrededor