Mujeres participan en labores arqueológicas

En su infancia, Nancy Aracely Tzec Aguilar, mujer maya habitante de Yucatán, escuchaba en voz de su abuela la magnificencia de la antigua ciudad de Uxmal. Algún día llegarán a conocerlo, les decía su abuela. Ella se preguntaba si aquel augurio se cumpliría, pues, cuando era pequeña, gran cantidad de las familias de la comunidad San Simón, Yucatán, no salían mucho de su pueblo. Creció con la idea de algún día conocer esa zona arqueológica —patrimonio de la humanidad por la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura— y, gracias a un programa impulsado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), ante la premura de avanzar en los trabajos de rehabilitación por el Tren Maya, el sueño de Nancy se vio cumplido. Ella y otras mujeres de su poblado se han sumado a un proyecto en el que son partícipes de trabajos arqueológicos de ese antiguo sitio maya, ubicado en la región conocida como el Pucc, la cual floreció en el periodo Clásico tardío del año 600 a 850 d. C. Al par