Ernst August von Hannover, de 66 años, vuelve al centro de la polémica luego de que el tribunal de Wels lo acusó de ser una amenaza, de daño a la propiedad y coacción, tras ser denunciado por una de sus empleadas y el esposo de esta de recibir amenazas por parte del aún esposo de Carolina de Mónaco, la primogénita de los príncipes Raniero III y Grace de Mónaco, así como hermana mayor de actual príncipe soberano de Mónaco, Alberto II. El lunes 7 de septiembre, agentes de Scharnstein en Austria acudieron al domicilio de Ernst August von Hannover en Grünau im Almtal, al centro del país y cerca de la frontera con Salzburgo, equipados con cámaras corporales para dejar evidencia de lo que estaba sucediendo pues amagó a sus empleados con enviarles matones. A mediados de julio de 2020, en medio del aislamiento social por la expansión de coronavirus en el mundo, Ernesto August fue ingresado a un centro psiquiátrico por intentar atacar a la policía con un cuchillo, pues minutos antes él mismo había marcado a la estació
Nuevamente arrestan a Ernest de Hannover
Ernst August von Hannover, de 66 años, vuelve al centro de la polémica luego de que el tribunal de Wels lo acusó de ser una amenaza, de daño a la propiedad y coacción, tras ser denunciado por una de sus empleadas y el esposo de esta de recibir amenazas por parte del aún esposo de Carolina de Mónaco, la primogénita de los príncipes Raniero III y Grace de Mónaco, así como hermana mayor de actual príncipe soberano de Mónaco, Alberto II. El lunes 7 de septiembre, agentes de Scharnstein en Austria acudieron al domicilio de Ernst August von Hannover en Grünau im Almtal, al centro del país y cerca de la frontera con Salzburgo, equipados con cámaras corporales para dejar evidencia de lo que estaba sucediendo pues amagó a sus empleados con enviarles matones. A mediados de julio de 2020, en medio del aislamiento social por la expansión de coronavirus en el mundo, Ernesto August fue ingresado a un centro psiquiátrico por intentar atacar a la policía con un cuchillo, pues minutos antes él mismo había marcado a la estació