Jorge Alejandro Sánchez Flores contó con la compañía de Adolfo Ruiseñor y Josué Sánchez cuando presentó su libro Botana chiapaneca, la tarde del miércoles 11 de octubre en el Museo del Café. En entrevista con el autor, comentó que hizo este trabajo a partir de múltiples archivos de su hemeroteca personal, así como de otros que buscó, a fin de que la obra presentada fuera más completa. Comenta que también se dio a la tarea de visitar a los dueños de negocios actuales, quienes dispuestos compartir su historia (no así sus recetas, que son secretas), participaron de una o de otra forma en la conformación de la obra. Algunos de los negocios que visitó Sánchez Flores en Tuxtla Gutiérrez fueron La Garrapata, Las Américas, La Casa de Ladrillo, Los Mangos y La Tía Mechita, los cuales dan cuenta de historia y tradición gastronómica, cada uno con platillos únicos que los hacen distinguirse, pues muchos de estos solo se sirven ahí o simplemente saben mejor de la mano de sus cocineras. Pero la investigación no se limit
Presentan el libro Botana chiapaneca
Jorge Alejandro Sánchez Flores contó con la compañía de Adolfo Ruiseñor y Josué Sánchez cuando presentó su libro Botana chiapaneca, la tarde del miércoles 11 de octubre en el Museo del Café. En entrevista con el autor, comentó que hizo este trabajo a partir de múltiples archivos de su hemeroteca personal, así como de otros que buscó, a fin de que la obra presentada fuera más completa. Comenta que también se dio a la tarea de visitar a los dueños de negocios actuales, quienes dispuestos compartir su historia (no así sus recetas, que son secretas), participaron de una o de otra forma en la conformación de la obra. Algunos de los negocios que visitó Sánchez Flores en Tuxtla Gutiérrez fueron La Garrapata, Las Américas, La Casa de Ladrillo, Los Mangos y La Tía Mechita, los cuales dan cuenta de historia y tradición gastronómica, cada uno con platillos únicos que los hacen distinguirse, pues muchos de estos solo se sirven ahí o simplemente saben mejor de la mano de sus cocineras. Pero la investigación no se limit