“Romeo y Julieta” regresa a Bellas Artes

Hector Berlioz no quería imitar ningún Romeo y Julieta. Cuando escuchó en Italia la tragedia lírica I Capuleti e i Montecchi, de Vincenzo Bellini, decidió darle forma material a algo que rondó su mente desde hace tiempo, cuenta el compositor estadounidense Stefan Lano, quien es el director concertador de la interpretación de la sinfonía coral “Romeo y Julieta Op. 17”, de Berlioz, que se presentará el 2 de febrero, a las 17:00 horas, en la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes con la Orquesta y el Coro del Teatro de Bellas Artes. Berlioz, continúa, enfrentó proyectos ambiciosos, “no menos que dos de las historias más grandes de la literatura” en “La condenación de Fausto” y “Romeo y Julieta”, “pero su intención no era presentarlo en ópera, como lo hizo Charles Gounod o como Leonard Bernstein en West Side Story. Él quería usar su talento para los colores orquestales, con un libreto que atendiera su necesidad de revelar ciertas ideas que, vistas desde hoy, eran revolucionarias en la interpretación orquestal