El director de Antigüedades y Museos de Siria aseguró que la parte central del templo de Bel, en Palmira, sigue en pie, a pesar de las informaciones de grupos activistas que apuntaban que había sido completa o parcialmente destruido por los yihadistas de Estado Islámico (EI). “Tenemos información de nuestra gente en Palmira de que hubo una explosión dentro de los muros del templo de Bel, pero de que el edificio central todavía está en pie”, dijo el arqueólogo jefe sirio, Mamoun Abdulkareem, desde Damasco. Activistas del grupo de Coordinación de Palmiran aseguraron que el espacio interior del templo había volado por los aires. Según el director del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, Rami Abdel-Rahman, algunos testigos vieron una explosión dentro de los muros fortificados del santurario. Pero los testigos no se aproximaron a la zona para ver exactamente qué daños se produjeron por temor a los combatientes del EI, explicó Abdel-Rahman. Abdulkareem advirtió que el templo todavía corre peligro por la pr
Sigue en pie templo de Bel en Palmira
El director de Antigüedades y Museos de Siria aseguró que la parte central del templo de Bel, en Palmira, sigue en pie, a pesar de las informaciones de grupos activistas que apuntaban que había sido completa o parcialmente destruido por los yihadistas de Estado Islámico (EI). “Tenemos información de nuestra gente en Palmira de que hubo una explosión dentro de los muros del templo de Bel, pero de que el edificio central todavía está en pie”, dijo el arqueólogo jefe sirio, Mamoun Abdulkareem, desde Damasco. Activistas del grupo de Coordinación de Palmiran aseguraron que el espacio interior del templo había volado por los aires. Según el director del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, Rami Abdel-Rahman, algunos testigos vieron una explosión dentro de los muros fortificados del santurario. Pero los testigos no se aproximaron a la zona para ver exactamente qué daños se produjeron por temor a los combatientes del EI, explicó Abdel-Rahman. Abdulkareem advirtió que el templo todavía corre peligro por la pr