Verónica Falcón toma terapia

Verónica Falcón sabe bien que la imaginación no tiene límites. La actriz mexicana de 57 años recuerda que cuando era niña le resultaba muy fácil imaginar juguetes que realmente no tenía pero que anhelaba con el alma: “Tenía una colección de ositos”, recuerda. Aunque reconoce este tipo de prácticas como parte de una interacción de los niños con el mundo que los rodea, también es consciente de que la imaginación puede resultar peligrosa si no viene acompañada de un juicio sano. Ese balance lo explora con su nuevo papel en la cinta de terror Imaginario: juguete diabólico, donde da vida a la doctora Soto, una psicóloga que ayuda a una pequeña niña llamada Alice (Pyper Braun), quien ha creado una escalofriante relación con su osito de peluche. “Mi personaje es la voz de la inteligencia, de la razón y la lógica. De alguna manera intenté eso también fuera de escena, escuchar a Pyper, tratar de empatizar con ella y que se sintiera cómoda; creo que lo logramos, tuvimos una conexión muy bonita”, cuenta Falcón. La his