A veces juntos en el escenario, pero también con momentos para disfrutar solos ante el Auditorio Nacional, Yuri y Cristian Castro, regresaron juntos al recinto de Reforma, para disfrutar junto a su público cada interpretación, desde canciones clásicas, hasta homenajes a grandes voces mexicanas. “Estoy emocionada a la par de ustedes, nerviosa, tenía muchas ganas de cantar con mi Cristian, ya lo extrañábamos mucho”, fueron las primeras palabras de Yuri, risueña y feliz como siempre suele presentarse ante su público, bromeando y agradeciendo a Dios. Tomando fuerza, la voz de Yuri tomó protagonismo junto a las coristas, siempre con una sonrisa aunque estuviera interpretando temas dolorosos. La música en vivo hizo que el show fuese más intenso por la claridad de los sonidos, haciendo que el público respondiera bailando. Yuri no se desenvolvió en el escenario al inicio del show, se limitó a cantar desde un punto de la tarima, lo que provocó que el público permaneciera en sus asientos, quietos apreciando los recurso
Yuri y Cristian Castro arman su propia fiesta
A veces juntos en el escenario, pero también con momentos para disfrutar solos ante el Auditorio Nacional, Yuri y Cristian Castro, regresaron juntos al recinto de Reforma, para disfrutar junto a su público cada interpretación, desde canciones clásicas, hasta homenajes a grandes voces mexicanas. “Estoy emocionada a la par de ustedes, nerviosa, tenía muchas ganas de cantar con mi Cristian, ya lo extrañábamos mucho”, fueron las primeras palabras de Yuri, risueña y feliz como siempre suele presentarse ante su público, bromeando y agradeciendo a Dios. Tomando fuerza, la voz de Yuri tomó protagonismo junto a las coristas, siempre con una sonrisa aunque estuviera interpretando temas dolorosos. La música en vivo hizo que el show fuese más intenso por la claridad de los sonidos, haciendo que el público respondiera bailando. Yuri no se desenvolvió en el escenario al inicio del show, se limitó a cantar desde un punto de la tarima, lo que provocó que el público permaneciera en sus asientos, quietos apreciando los recurso