Atrapados en el combate

Se está a merced de innecesarias contiendas sobre los derechos y libertades. Los beligerantes son órganos del Estado y funcionarios que litigan entre sí sobre tareas que inciden en la vida de los ciudadanos. En el fragor del combate, la metralla llueve sobre la Nación y los derechos de los mexicanos. Los funcionarios públicos están obligados, sin salvedad, al cumplimiento de deberes que no pueden desatender discrecionalmente, impulsados por intereses personales o facciosos. Han protestado (prometido) cumplir y hacer cumplir la Constitución y las leyes que de ella emanan. Y deben respetar y garantizar los derechos fundamentales de los individuos y responder por las violaciones de esos derechos (artículo 1º constitucional). Pero sucede que algunas autoridades se niegan a cumplir voluntariamente los deberes de su cargo, y por ello otras autoridades o grupos de ciudadanos se ven en la necesidad de recurrir a procedimientos judiciales para obtener, a golpes de sentencia, lo que debieran recibir sin necesidad de