Caos eterno que encamina a Reino Unido a elecciones

Cambió el premier, el estilo, la retórica y el equipo, pero al final el resultado sigue siendo el mismo: un completo caos. Apenas lleva seis semanas en el 10 de Downing Street y en la partida del Brexit, Boris Johnson no ha avanzado ni una sola casilla; por el contrario, ha retrocedido en medio de un absoluto desorden que trastoca hasta su entorno familiar. Desde el momento en que la Cámara de los Comunes reinició actividades, el pasado 3 de septiembre, las derrotas han sido una tras otra. No había comenzado a operar Westminster y el controvertido euroescéptico ya había perdido la mayoría parlamentaria. En medio de amenazas de expulsión, el tory Philip Lee optó por pasarse a las filas del Partido Liberal Demócrata. Denunció “la agresiva forma con que se busca un Brexit nocivo”, así como el virus del populismo que infecta al partido. Con el cambio de formación, la alianza con los unionistas norirlandeses dejó de ser suficiente para que los conservadores cuenten con mayoría absoluta. A la rebelión de Lee prosig