Desinformación, deepfakes y memes

Las redes sociales y la inteligencia artificial han generado un salto cualitativo en el formato de las campañas electorales. La posibilidad de segmentar los mensajes, fragmentar y polarizar al electorado y la capacidad de actores extranjeros de influir en los procesos electorales pusieron el tema de las redes sociales en la mira. El escándalo de Cambridge Analítica y la elección presidencial de 2016 en Estados Unidos y el uso intensivo de WhatsApp en la campaña presidencial de 2018 en Brasil encendieron las alarmas. Merced al desarrollo de la inteligencia artificial generativa, el super ciclo electoral de 2024 tuvo como protagonistas en muchos países a los deepfakes (imágenes, videos y audios), las fakenews, los medios de comunicación sintéticos y los influencers artificiales -todos distribuidos y viralizados a través de las redes sociales y las herramientas de mensajería directa. La regulación de las campañas electorales en las redes presenta varios desafíos: el anonimato de los usuarios; la velocidad de c