Educación y movilidad social

La brecha salarial entre quienes concluyen bachillerato y los que logran obtener un título universitario es de 70 % en México. Pero el problema no queda resuelto al obtenerse un título y una cédula profesional. La articulación entre el perfil de miles de egresados y la capacidad de absorción del mercado de trabajo sigue sin resolverse. Es común encontrar a un profesionista que está subempleado, un posgraduado que se convierte en comerciante en el mercado informal o un taxista que tiene estudios de licenciatura. En México se avanza en la cobertura de educación superior entre los jóvenes. Sin embargo, el aumento en la educación formal no tiene el impacto deseado en el bienestar de la población. En gran medida, esto es porque la mayor escolarización no se traduce en un incremento en habilidades para el exigente modelo de producción. Escolaridad no es igual a capital humano. México tiene un universo laboral cada vez más competitivo y complejo, esto obliga a que se ajuste la información que se da en los programas