No hay nota más triste. Diecinueve niños indígenas de entre 8 y 14 años que quedaron huérfanos por el asesinato de sus padres en Chilapa se levantan en armas y se unen a las filas de la policía comunitaria. ¿Qué puede hacer que un niño tenga un arma en la mano? ¿El desamparo? ¿El miedo? ¿El odio? ¿La desesperanza? Niños que deberían estar en la escuela están en la policía comunitaria porque en vez de heredar un instrumento musical de sus padres, heredaron un conflicto que les puso un arma en las manos. Y pese a las cifras de 97 personas asesinadas a diario en el país; nos dicen que la violencia no ha crecido, sino que se ha «establilizado». Tal vez en números estadísticos sea así, pero la realidad es que la violencia está encontrando relevos en la infancia y la venganza. Al fallar el Estado la justicia se hace por propia cuenta y la perspectiva es ojo por ojo hasta ser el país de los ciegos. Esa es la perspectiva porque sería iluso esperar que la realidad cambie si en tres sexenios se ha seguido la misma fórm
El país de los ciegos
No hay nota más triste. Diecinueve niños indígenas de entre 8 y 14 años que quedaron huérfanos por el asesinato de sus padres en Chilapa se levantan en armas y se unen a las filas de la policía comunitaria. ¿Qué puede hacer que un niño tenga un arma en la mano? ¿El desamparo? ¿El miedo? ¿El odio? ¿La desesperanza? Niños que deberían estar en la escuela están en la policía comunitaria porque en vez de heredar un instrumento musical de sus padres, heredaron un conflicto que les puso un arma en las manos. Y pese a las cifras de 97 personas asesinadas a diario en el país; nos dicen que la violencia no ha crecido, sino que se ha «establilizado». Tal vez en números estadísticos sea así, pero la realidad es que la violencia está encontrando relevos en la infancia y la venganza. Al fallar el Estado la justicia se hace por propia cuenta y la perspectiva es ojo por ojo hasta ser el país de los ciegos. Esa es la perspectiva porque sería iluso esperar que la realidad cambie si en tres sexenios se ha seguido la misma fórm