En los países pobres la escasez de recursos médicos es norma. Se muere por pobreza, por falta de camas hospitalarias y carencia de insumos y por lejanía de centros hospitalarios. La falta de dinero mata: fenecer por ser miserable es cruda realidad. Baste decir, aunque no son las enfermedades la única razón, que en algunos países de África el promedio de vida es de 40 años mientras en el mundo occidental es de 80. Ha sido un error, por pena, incompetencia y/o negación, no aceptar el diagnóstico de miseria o pobreza como motivo de defunción. Tozudez humana no entender la miseria como enfermedad. Las epidemias siempre han sido un inmenso reto para la humanidad. Tanto por el número de muertos como por el reto que imponen a Estados y servicios médicos. La pandemia actual difiere de las previas por diversos motivos. Se destacan dos. Se ha diseminado con velocidad: la inmensa mayoría de los países han sido afectados. Segunda. La comunicación en 2020 es instantánea. Los sucesos en México se conocen en cuestión de mi
Escasez
En los países pobres la escasez de recursos médicos es norma. Se muere por pobreza, por falta de camas hospitalarias y carencia de insumos y por lejanía de centros hospitalarios. La falta de dinero mata: fenecer por ser miserable es cruda realidad. Baste decir, aunque no son las enfermedades la única razón, que en algunos países de África el promedio de vida es de 40 años mientras en el mundo occidental es de 80. Ha sido un error, por pena, incompetencia y/o negación, no aceptar el diagnóstico de miseria o pobreza como motivo de defunción. Tozudez humana no entender la miseria como enfermedad. Las epidemias siempre han sido un inmenso reto para la humanidad. Tanto por el número de muertos como por el reto que imponen a Estados y servicios médicos. La pandemia actual difiere de las previas por diversos motivos. Se destacan dos. Se ha diseminado con velocidad: la inmensa mayoría de los países han sido afectados. Segunda. La comunicación en 2020 es instantánea. Los sucesos en México se conocen en cuestión de mi