El titular de la Secretaría de Educación Pública, Mario Delgado, reveló que en diciembre pasado, la niña Fátima, una menor de 13 años, que presuntamente fue lanzada desde el tercer piso de la secundaria 236 en la alcaldía Iztapalapa, supuestamente por una compañera que la acosaba debido a su afición al K-pop, denunció el caso de bullying, por lo que no quería regresar al plantel, y que, tras esto, se hizo una reunión con sus compañeros para que dejaran de molestarla. Detalló que fue canalizada a la clínica de la adolescencia en el Hospital Materno Infantil de Inguarán, donde fue atendida el 30 de enero, y en donde el diagnóstico fue que tenía depresión y era víctima de bullying. En entrevista afuera de Palacio Nacional se le cuestionó si “¿se habla de que ya han hecho denuncias?”. “Sí, efectivamente. Hizo una denuncia el 13 de diciembre. La recibió el subdirector y a ella se le canalizó. Primero hizo una reunión con los jóvenes, los maestros, para que dejaran de molestarla. Luego se atravesaron las vacaciones
Fátima tenía depresión y era víctima de bullying
El titular de la Secretaría de Educación Pública, Mario Delgado, reveló que en diciembre pasado, la niña Fátima, una menor de 13 años, que presuntamente fue lanzada desde el tercer piso de la secundaria 236 en la alcaldía Iztapalapa, supuestamente por una compañera que la acosaba debido a su afición al K-pop, denunció el caso de bullying, por lo que no quería regresar al plantel, y que, tras esto, se hizo una reunión con sus compañeros para que dejaran de molestarla. Detalló que fue canalizada a la clínica de la adolescencia en el Hospital Materno Infantil de Inguarán, donde fue atendida el 30 de enero, y en donde el diagnóstico fue que tenía depresión y era víctima de bullying. En entrevista afuera de Palacio Nacional se le cuestionó si “¿se habla de que ya han hecho denuncias?”. “Sí, efectivamente. Hizo una denuncia el 13 de diciembre. La recibió el subdirector y a ella se le canalizó. Primero hizo una reunión con los jóvenes, los maestros, para que dejaran de molestarla. Luego se atravesaron las vacaciones