En lo que algunos interpretaron como un paso adelante notable, con el vía libre del Vaticano y fuertes restricciones, la Iglesia italiana le abrió las puertas a los sacerdotes homosexuales. Según un documento aprobado “en vía experimental” por tres años por el Dicasterio del Clero para la Conferencia Episcopal italiana, los seminarios italianos podrán admitir candidatos gay, siempre y cuando -y tal como se le exige también a los candidatos heterosexuales- garanticen el compromiso a “elegir libremente y vivir responsablemente la castidad en el celibato”. La línea de la Iglesia católica siempre se remontó a una “instrucción” de 2005 de la Congregación para la Educación católica “acerca de los criterios de discernimiento vocacional con respecto a las personas con tendencias homosexuales en vista de su admisión al seminario y a los órdenes sacros”. Ese texto, de la época de Benedicto XVI, que fue ratificado por Francisco en 2016, estableció que la “Iglesia, aun respetando profundamente a las personas en cuestión,
Iglesia italiana abre puertas a sacerdotes homosexuales
En lo que algunos interpretaron como un paso adelante notable, con el vía libre del Vaticano y fuertes restricciones, la Iglesia italiana le abrió las puertas a los sacerdotes homosexuales. Según un documento aprobado “en vía experimental” por tres años por el Dicasterio del Clero para la Conferencia Episcopal italiana, los seminarios italianos podrán admitir candidatos gay, siempre y cuando -y tal como se le exige también a los candidatos heterosexuales- garanticen el compromiso a “elegir libremente y vivir responsablemente la castidad en el celibato”. La línea de la Iglesia católica siempre se remontó a una “instrucción” de 2005 de la Congregación para la Educación católica “acerca de los criterios de discernimiento vocacional con respecto a las personas con tendencias homosexuales en vista de su admisión al seminario y a los órdenes sacros”. Ese texto, de la época de Benedicto XVI, que fue ratificado por Francisco en 2016, estableció que la “Iglesia, aun respetando profundamente a las personas en cuestión,