Existe una anécdota sobre el presidente estadounidense Abraham Lincoln defendiendo a México durante la guerra de Reforma, época en la que el gobierno de su país estaba preocupado por la influencia de naciones europeas en América Latina. En ese contexto, en 1861 su homólogo Benito Juárez suspendió temporalmente el pago de la deuda externa a Francia, España e Inglaterra, que respondieron enviando tropas para exigirlo. Sin embargo, el presidente Lincoln se negó a reconocer la intervención europea en México y, en su lugar, envió una carta de apoyo al presidente Juárez en la que escribió: “Estamos apenados al enterarnos de que tu país está bajo la presión de países extranjeros para el pago de deudas. Estados Unidos está listo para ayudar a México en cualquier forma que sea aceptable por su gobierno”. Esta misiva es considerada como un acto de solidaridad y apoyo del mandatario extranjero hacia México en un momento de lucha y crisis para éste. Hoy viene a cuento esta anécdota a propósito de las consecuencias que ya
Insultos que destruyen
Existe una anécdota sobre el presidente estadounidense Abraham Lincoln defendiendo a México durante la guerra de Reforma, época en la que el gobierno de su país estaba preocupado por la influencia de naciones europeas en América Latina. En ese contexto, en 1861 su homólogo Benito Juárez suspendió temporalmente el pago de la deuda externa a Francia, España e Inglaterra, que respondieron enviando tropas para exigirlo. Sin embargo, el presidente Lincoln se negó a reconocer la intervención europea en México y, en su lugar, envió una carta de apoyo al presidente Juárez en la que escribió: “Estamos apenados al enterarnos de que tu país está bajo la presión de países extranjeros para el pago de deudas. Estados Unidos está listo para ayudar a México en cualquier forma que sea aceptable por su gobierno”. Esta misiva es considerada como un acto de solidaridad y apoyo del mandatario extranjero hacia México en un momento de lucha y crisis para éste. Hoy viene a cuento esta anécdota a propósito de las consecuencias que ya