La Corte no debe abrir la caja de Pandora

Enorme revuelo causó la discusión sostenida en la Suprema Corte acerca de la “cosa juzgada” que incluso llegó a la mañanera provocando una tajante respuesta de la presidenta a favor de la firmeza de las resoluciones judiciales. La Corte intentó contener las reacciones que suscitó el asunto emitiendo un comunicado en el que reconoció “que la cosa juzgada es un principio esencial en el que se sustenta el derecho a la seguridad jurídica. Esto garantiza que lo resuelto en una sentencia firme sea definitivo e inmutable. Para este Máximo Tribunal, la cosa juzgada nunca ha sido objeto de cuestionamientos ni ha estado en duda su garantía”. El problema es que en el mismo comunicado se defiende la posibilidad de que lo resuelto en una sentencia pierda su firmeza e inmutabilidad a través de la aplicación de una figura jurídica denominada acción de nulidad de juicio concluido la cual -explica el comunicado- “procede, entre otros supuestos, cuando exista colusión o maniobras fraudulentas de las partes litigantes en perju