La falsa promesa de la evaluación docente

El 22 de febrero, en estas páginas, el consejero presidente del INEE escribió un artículo titulado “El sentido de la evaluación del desempeño docente”. No me detengo en otras consideraciones, sino en la defensa que hace de esa valoración (EDD). Dice que este instrumento “contempla tres componentes: el cumplimiento mínimo de responsabilidades; el dominio de competencias pedagógicas, y el dominio de conocimientos de la disciplina que imparten”. Da a conocer un dato importante: del total de los que “presentaron esta evaluación, 87% de los docentes cuentan con estas herramientas lo que es un dato esperanzador para el país”. Hace cuentas: si hay 1.4 millones de docentes en la escuela obligatoria, “182 mil no tienen las condiciones mínimas para ejercer su profesión”. Calcula que si atienden a 30 estudiantes, cada uno en promedio, a “cerca de 5.46 millones de escolares” les causará daño su “condición de insuficiencia”. Argumenta que esos profesores carecen de una o dos condiciones: “no cumplen con la normalidad míni