¿Límite de las ocurrencias?

Diferencias aparte (muchas y profundas por la distinta arquitectura de sus sistemas de gobierno) el 2019 nos permitió ver un rasgo común y profundo entre Donald Trump, Evo Morales y López Obrador: como jefes de estado y de gobierno han acreditado de sobra su incomodidad ante las obligaciones y los límites que les imponen sus constituciones. Los tres han escrito en su momento páginas inéditas del incumplimiento de las obligaciones constitucionales. No hay un previsible buen final para los dos primeros, con más tiempo de ejercicio en el poder que el mexicano. Evo de plano, vio su cierre de ciclo con su violenta defenestración en un golpe de timón ampliamente popular, aunque apoyado por mano militar. Bajo la silla presidencial, Trump resiente algunas incómodas primeras espinas colocadas por los demócratas de la Cámara de los Representantes, que pretenden llevarlo a enfrentar un juicio político. Es improbable que lo logren, pero la acción y su fuerza mediática nos hace recordar las sanciones a las que se expusier