Los ciclos económicos y la política

Dicen por ahí que los economistas pasan la mitad del tiempo tratando de pronosticar qué pasará y la otra mitad explicando por qué no pasó. Puede ser. Pero más allá del chiste —o la anécdota— hay temas que los economistas han tratado de entender desde hace muchos años y sobre los cuales hay más conocimiento, pero no necesariamente mayor comprensión. Uno de ellos: los ciclos económicos. Hay épocas en las que a las economías les va bien y otras en las que no tanto, que hay rachas donde la producción crece muy rápido y otras donde apenas se mueve. A esas etapas les ponen nombre y las agrupan bajo el concepto de ciclos económicos. A posteriori, se puede explicar qué pasó en cierta etapa: por qué una economía creció, otra se contrajo, por qué eso se llama desaceleración o recesión. Pero ahí les va la verdad. Nadie entiende a cabalidad por qué se dan esos ciclos, no queda claro por qué de repente las economías se aceleran y de pronto se frenan. Pero hay algo que sí se puede conocer a partir de la información proveni