Por la falta de protocolos y omisiones para prevenir, identificar, combatir y sancionar el abuso sexual en escuelas, el organismo civil Educación con Rumbo (ECR) obtuvo una suspensión por parte del Poder Judicial para que la Secretaría de Educación Pública (SEP) y la Fiscalía General de la República garanticen que los planteles sean espacios seguros para niñas, niños y adolescentes, ante el aumento de casos de violencia sexual y pornografía infantil en los centros educativos del país. “Esperamos que el amparo y la resolución del Poder Judicial de la Federación sea acatada sin reservas por las autoridades considerando que se trata de una problemática muy sensible que afecta a la niñez”, dijo el abogado de la ONG, Miguel Ángel Ortiz. En un comunicado, refirió que el amparo presentado se dirige a visibilizar el abuso sexual creciente en escuelas, donde México ocupa los primeros lugares a nivel internacional en violencia sexual infantil y pornografía de menores. “El abuso sexual en escuelas es un delito lacerante
Ordenan prevenir el abuso sexual en las escuelas
Por la falta de protocolos y omisiones para prevenir, identificar, combatir y sancionar el abuso sexual en escuelas, el organismo civil Educación con Rumbo (ECR) obtuvo una suspensión por parte del Poder Judicial para que la Secretaría de Educación Pública (SEP) y la Fiscalía General de la República garanticen que los planteles sean espacios seguros para niñas, niños y adolescentes, ante el aumento de casos de violencia sexual y pornografía infantil en los centros educativos del país. “Esperamos que el amparo y la resolución del Poder Judicial de la Federación sea acatada sin reservas por las autoridades considerando que se trata de una problemática muy sensible que afecta a la niñez”, dijo el abogado de la ONG, Miguel Ángel Ortiz. En un comunicado, refirió que el amparo presentado se dirige a visibilizar el abuso sexual creciente en escuelas, donde México ocupa los primeros lugares a nivel internacional en violencia sexual infantil y pornografía de menores. “El abuso sexual en escuelas es un delito lacerante