Primavera mexicana

Me atrevo a decir que la primavera es la estación más popular en el mundo. Es la época en que los árboles florecen, la que deja atrás el invierno y preludia el ansiado verano. Por eso ha sido utilizada para bautizar a diversos movimientos revolucionarios, como sinónimo del resurgimiento y despertar de los pueblos, independientemente del momento en que se gesten. En México, esta temporada tiene una carga política importante. Su inicio coincide con el natalicio de Benito Juárez, y será también aquella en que la democracia mexicana empiece a florecer en un terreno particularmente infértil para la participación ciudadana, al haber sido altamente maltratada por quienes se supone que deberían actuar como sus mayores cuidadores y promotores. El proceso de revocación de mandato que se llevará a cabo el próximo domingo en México ejemplifica con claridad esa lucha entre quienes buscamos que la democracia prevalezca en el país y quienes obstinadamente pretenden continuar en un esquema de democracia a modo, útil solament