¿Quién da voz a América Latina en la ONU?

Con la democracia bajo amenaza, la pobreza con cifras al alza, el narcotráfico en aumento, la migración irregular en avalancha y la factura en derechos humanos en rojo, la agenda de urgencias de América Latina y el Caribe quedó relegada a los últimos puestos del debate de asuntos preferenciales de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en Nueva York. La guerra que Rusia desató contra Ucrania hace casi siete meses acaparó la atención global en la ONU y robó las luces a una región que, como la latinoamericana y caribeña, está golpeada por la ausencia de liderazgos, la creciente ingobernabilidad y los añejos fantasmas de ser “repúblicas bananeras” sin rumbo signadas por los abusos políticos y el caos institucional. “América Latina no figuró en la agenda prioritaria de la Asamblea General (…) ni del Consejo de Seguridad, tampoco en la del gobierno de Estados Unidos, una potencia con intereses geopolíticos declarados en el hemisferio”, afirmó el economista Edgar Gutiérrez, ex cancille