Reformar el SAR

La semana pasada, el Gobierno Federal anunció las líneas básicas de una reforma al sistema de pensiones. El simple hecho de plantear esa iniciativa de reforma es positivo, pues implica que reconoce el grave problema del sistema de pensiones de México. Se trata de una reforma largamente postergada, a pesar de que diversos grupos de especialistas y funcionarios han estado conscientes de la gravedad de este problema nacional. En México, la esencia del problema es que, desde su establecimiento, el Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR) ha estado subfondeado, lo que se traduce en que las pensiones son una fracción (poco más de 30%) de los últimos salarios recibidos por quien se jubila, además de que requieren de 1,250 semanas de cotización, esto es, 24 años, lo que hace que pocos trabajadores puedan cumplirlo al 100%. Además, si bien se trata de un esquema tripartito, la principal carga recae en el empleador (5.15% de la cuota), pues el gobierno aporta 0.225%, y el trabajador sólo 1.125% de su salario. La carga de