¿Togas o justicia constitucional?

Tras la elección de los nuevos integrantes de la Suprema Corte, el debate se ha centrado en detalles llamativos, pero periféricos. A partir de las declaraciones de quienes asumirán próximamente el cargo de ministros, se ha discutido si deben usar o no toga, o si las sesiones del pleno deberían trasladarse a las plazas públicas en lugar de mantenerse en el recinto institucional de la Corte. Ese no debería ser el centro del debate. Lo importante no es la indumentaria de las ministras y los ministros ni el lugar desde el que sesionen. Lo relevante es que resuelvan conforme al Derecho. Que protejan los derechos humanos. Que hagan justicia. Si una sentencia es jurídicamente sólida y justa, bien puede dictarse en toga o en bermudas; en la sede oficial o en una plaza pública. La forma nunca debe opacar al fondo. No se niega que los símbolos tienen su lugar. Las togas, las sedes solemnes, el lenguaje jurídico, todo eso ayuda a comunicar la importancia de las decisiones que se toman y a reforzar la autoridad de las i