En la frontera entre México y Estados Unidos uno de los grandes problemas es el tráfico de medicinas. La zona siempre ha tenido fama de que abundan las cantinas. Ciertamente es uno de los atractivos, porque del lado estadounidense, de las ciudades vecinas acude mucho turismo regional; sin embargo, en las últimas décadas las farmacias han superado a los bares y cantinas. Enfermarse en Estados Unidos generalmente no debe ser de preocupación, porque es obligatorio contar con un seguro médico que eventualmente cubra las necesidades de la persona, o al menos, las necesidades más inmediatas. Pero lo cierto es que un porcentaje de la población en la Unión Americana no cuenta con seguro médico y, por otro lado, entre quienes sí lo tienen, a muchos no les cubre todos sus medicamentos. Estos dos sectores de la sociedad estadounidense no son mayoría, pero aun así suma millones de personas. Esta tendencia de traficar medicinas no es nueva, pero desde la década de los 90 se ha ido incrementando. El “turismo médico” quedó
Tráfico de medicinas, problema fronterizo
En la frontera entre México y Estados Unidos uno de los grandes problemas es el tráfico de medicinas. La zona siempre ha tenido fama de que abundan las cantinas. Ciertamente es uno de los atractivos, porque del lado estadounidense, de las ciudades vecinas acude mucho turismo regional; sin embargo, en las últimas décadas las farmacias han superado a los bares y cantinas. Enfermarse en Estados Unidos generalmente no debe ser de preocupación, porque es obligatorio contar con un seguro médico que eventualmente cubra las necesidades de la persona, o al menos, las necesidades más inmediatas. Pero lo cierto es que un porcentaje de la población en la Unión Americana no cuenta con seguro médico y, por otro lado, entre quienes sí lo tienen, a muchos no les cubre todos sus medicamentos. Estos dos sectores de la sociedad estadounidense no son mayoría, pero aun así suma millones de personas. Esta tendencia de traficar medicinas no es nueva, pero desde la década de los 90 se ha ido incrementando. El “turismo médico” quedó