Unos más inocentes que otros

Dice la Constitución que toda persona imputada tiene derecho a que se presuma su inocencia mientras no se declare su responsabilidad mediante sentencia emitida por un juez. Este derecho, sin embargo, tiene serios límites en México. En 2008, durante la administración de Felipe Calderón, fue introducida en la Constitución la figura del arraigo, que permite privar de la libertad —hasta por 80 días— a cualquier persona que sea sospechosa de pertenecer al crimen organizado para ser investigada. Es decir, en lugar de investigar a una persona para luego detenerla de forma justificada, el arraigo permite la detención de una persona para ser investigada. Una de las promesas de Morena fue eliminar el arraigo de la Constitución por considerarlo violatorio de la presunción de inocencia. Sin embargo, la figura subsiste. Existe además la figura de la prisión "preventiva" oficiosa, que obliga a encarcelar a personas que son acusadas de ciertos delitos, mientras dure su juicio, aun cuando no exista sentencia emitida por un