Dijeron parto, fue desmayo

El reporte fue uno, la realidad, otra. Otra vez, el reportante o el operador del C4 jugaron al “teléfono descompuesto”. Los paramédicos acudieron prestos al servicio. Regresaron a su base tras el deber cumplido, pero preocupados por las llamadas falsas o distorsionadas. “Por eso es que a veces las ambulancias de plano no llegan o tardan en llegar a una verdadera emergencia, por culpa de personas así”, dice un curioso al ver salir a los paramédicos de la tienda y subir a la unidad 264 de la Cruz Roja Mexicana. En sus rostros se percibe seriedad, desencanto. Llegaron preparados para atender un parto. Regresaron a su base tras atender un desmayo. El reporte distó mucho de la realidad. “A veces también se exagera la situación , pero es para que lleguen, porque si uno dice un desmayo no llegan. Tiene uno que decir que hay heridos o como en este caso un parto, para que vengan rápido”, justifica un hombre. Y aunque no lo dice, puede ser que fue él quien hizo el reporte exagerado y falso. “Hay una mujer dando a luz