El fuego consumió sus cosas, pero no su fortaleza de mamá

Ni siquiera una escena de horror de cualquier película es capaz de describir los momentos de temor y angustia que vivió la señora Verónica mientras su pequeña vivienda era consumida por el fuego. Confiesa que la única razón por la que sacó fuerzas de la nada, es porque pensó en sus hijos y sabe que dependen de ella. Fue a eso de las 2:00 de la madrugada del pasado sábado cuando Verónica se dio cuenta de que estaba en medio de las llamas y del humo que consumían su vivienda, ubicada en la colonia Miravalle, cerca del libramiento Norte de Tuxtla Gutiérrez. Comenta que no se dio cuenta de que el cilindro de gas que tenía al interior de su vivienda estaba con una fuga, lo que combinado con una veladora encendida provocó que el fuego consumiera los muebles de madera, un refrigerador, ropa y todos los electrodomésticos. Cuando despertó solo podía ver humo en la parte del techo de lámina, sentía un intenso calor y la respiración se le dificultaba. En medio de lo que parecía una de las peores pesadillas, logró r