Los ahorros de varios años de trabajo fueron sustraídos del cuarto de vecindad que rentaban dos hermanos. El robo se perpetró mientras los consanguíneos estaban ausentes, laborando. Marcelino López Gómez (26 años) no lo podía creer. A su lado, su hermano Juan Carlos López Gómez (19) compartía la aflicción de su carnal. Han compartido trabajo, comparten el mismo cuarto y ahora los unía el mismo dolor. Oriundos de San Pedro Chenalhó, los hermanos vinieron a la capital chiapaneca a laborar. Durante dos años han ahorrado el fruto de su esfuerzo diario. La noche del miércoles a las 23:00 horas, los hermanos retornaron al cuarto de la vecindad donde rentan, ubicada en la 9ª Sur y 2ª Poniente de Tuxtla Gutiérrez. Cuando Marcelino se disponía a abrir el candado, notó que estaba violado y su corazón se aceleró. Sus temores se agigantaron cuando vio que la chapa de la puerta también estaba forzada. Al entrar al cuarto y encender la luz, había un desorden total. Marcelino y Juan Carlos casi se desmayan al ver que las al
Roban ahorro de dos años a hermanos
Los ahorros de varios años de trabajo fueron sustraídos del cuarto de vecindad que rentaban dos hermanos. El robo se perpetró mientras los consanguíneos estaban ausentes, laborando. Marcelino López Gómez (26 años) no lo podía creer. A su lado, su hermano Juan Carlos López Gómez (19) compartía la aflicción de su carnal. Han compartido trabajo, comparten el mismo cuarto y ahora los unía el mismo dolor. Oriundos de San Pedro Chenalhó, los hermanos vinieron a la capital chiapaneca a laborar. Durante dos años han ahorrado el fruto de su esfuerzo diario. La noche del miércoles a las 23:00 horas, los hermanos retornaron al cuarto de la vecindad donde rentan, ubicada en la 9ª Sur y 2ª Poniente de Tuxtla Gutiérrez. Cuando Marcelino se disponía a abrir el candado, notó que estaba violado y su corazón se aceleró. Sus temores se agigantaron cuando vio que la chapa de la puerta también estaba forzada. Al entrar al cuarto y encender la luz, había un desorden total. Marcelino y Juan Carlos casi se desmayan al ver que las al