El mensaje presidencial

Los reflectores políticos van a estar enfocados hoy al mensaje del presidente Enrique Peña Nieto con motivo de su tercer informe de actividades. El mensaje será difundido hoy a medio día, seguramente en red nacional.

Hace mucho tiempo que los mexicanos no escuchamos anuncios espectaculares en ese tipo de informes. Los presidentes anteriores y el presidente Peña en sus dos primeros años de gobierno han expresado sólo cosas que ya sabíamos con anticipación.

Y hoy no hay tampoco expectativas de anuncios rimbombantes que pudieran impactar de manera positiva entre más de 100 millones de mexicanos. Pero todo puede pasar. Esperemos.

La otra noticia fue ayer la instalación del Congreso federal, la entrega por escrito del tercer informe presidencial a cargo del secretario de gobernación Miguel Ángel Osorio Chong y posteriormente los posicionamientos de las fracciones parlamentarias.

El informe ofrece un balance del estado general que guarda la Administración Pública Federal y da a conocer las decisiones y medidas tomadas entre el 1 de septiembre de 2014 y el 31 de agosto de 2015. Es un ordenamiento de la Constitución General de la República.

El último presidente en acudir ante el Congreso de la Unión a rendir su Informe de Gobierno fue Vicente Fox Quesada, en 2006. Luego, con Felipe Calderón Hinojosa, los informes modificaron su formato. En el primer año de su gobierno emitió sólo un breve mensaje.

Posteriormente, el 15 de agosto de 2008 se reformaron los artículos 69 y 93 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. El primero establece que “en la apertura de Sesiones Ordinarias del Primer Periodo de cada año de ejercicio del Congreso, el Presidente de la República presentará un informe por escrito. Él no está obligado a ir. Por eso Osorio Chong entregó ayer el referido informe.

 SS debería poner mucho ojo

Autoridades de la Secretaría de Salud deberían contar con un área específica con facultades legales para supervisar el funcionamiento de los hospitales públicos y privados de Chiapas.

En Tuxtla Gutiérrez, por citar un ejemplo, está el hospital denominado “Metropolitano” cuya atención deja mucho que desear. El colmo es tal que, recientemente, un médico que prestaba guardias en ese mismo hospital se puso mal en algún momento en otro sitio, fue llevado al área de urgencias de ese  mismo nosocomio a recibir atención médica pero lamentablemente falleció como consecuencia, cuentan los enterados, de la carencia de insumos y equipo especializado para prestarle los primeros auxilios.

Y no es la primera vez que ocurre algo parecido a eso pues ya ha habido denuncias por presuntas negligencias médicas u otras carencias que han obligado a que pacientes, gravemente heridos, por accidentes automovilísticos o con otras afecciones graves a su salud, sean traslados a otros sitios en busca de salvarles la vida.

Va pues, señalan propios y extraños, que la avaricia de los médicos Armando Balcázar Castañón, Eddy Enrique Alfaro Coutiño y Mario Cuesta, los lleve a vociferar a los cuatro vientos tener asegurada ya la continuidad del contrato por servicios médicos con el ayuntamiento tuxtleco.

Evidentemente, sólo el tráfico de influencias les podría tener asegurado ese propósito. No estaría mal, que socios de una empresa hospitalaria como esa aspiraran a jugosos contratos. Lo malo y potencialmente riesgoso es que ese hospital privado ha venido de la medianía a la mediocridad en los servicios que presta. Hasta el momento, solo cuenta con 22 camas, tres quirófanos y una sola sala de urgencias. ¿Con esas insuficiencias pretende ese hospital garantizar óptimos servicios médicos a miles de trabajadores del ayuntamiento tuxtleco y del Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (SMAPA)? Hay que agregar a otros tantos trabajadores de empresas particulares como: Seguros Tepeyac, GNP, AXXA, Qualitas, Imbursa, METLIFE, AMÉRICA, BANBAJIO, HSBC, SERFIN, SANTANDER y PEMEX, entre otras, además de múltiples pacientes que llegan de manera independiente. ¿Con sólo 22 camas? Obviamente, los sindicatos han adelantado ya su rechazo a las pretensiones mencionadas anteriormente.

Pero la cosa no termina allí, hay más. La ambición de los referidos galenos llega a tanto que ahora hasta están ofreciendo estos mercaderes de la medicina un “segundo” Metropolitano.

Quieren hacer encajar ese proyecto en el Comité de Voluntarios de Cancerología del Estado de Chiapas (Covocach), institución creada hace más de veinte años con un patronato de la sociedad civil para ayudar a enfermos de cáncer.

Los terrenos donde está esa clínica fueron donados por el gobierno del estado en tiempos de Patrocinio González Garrido. Pero ahora, los mencionados médicos pretenden hacer pasar al Covocach como una “clínica privada” cuando sus orígenes provinieron del altruismo y la filantropía.

La presidenta de ese patronato habría de responder cuánto le pagan y a dónde va a parar esa “renta”. Y una cosa más: trascendió que hasta han pensado ya en artilugios legales para escriturar esa propiedad a nombre de los particulares.

Si las autoridades correspondientes del gobierno estatal y hasta las fiscales atendieran y le rascaran un poquito más al tema, la cloaca se destaparía y dejaría al descubierto muchas sorpresas. Ahí la dejamos, por momento.

 De boca en boca

Como invitado y testigo de honor, el presidente de México Enrique Peña Nieto arribó a la selecta celebración. Fueron pocos los invitados quienes acudieron a la cita en Santa Fe, en una de las zonas más  exclusivas de la ciudad de México. Sin embargo, por la trascendencia en la vida política de Chiapas, solo podemos dar como primicia que ahí prácticamente se marcó y fijó ya la sucesión. Sí, uno de los presentes recibió el visto bueno para ir en busca del 2018.

alexmoguels@hotmail.com