8 de diciembre, tres fechas históricas para la esperanza en Chiapas…

El 8 de diciembre de 1913 se dio a conocer al público el Himno a Chiapas, obra pacifista que otorgaba esperanza a nuestra tierra nativa, y el mismo día pero del año de 1980, gracias a las gestiones de Miguel Álvarez del Toro (+), se decreta el Parque Nacional del Cañón del Sumidero con el ánimo de salvar a la naturaleza. Y ayer con la misma fecha, pero del 2018, el Dr. Rutilio Escandón como Gobernador asume el rumbo de Chiapas, creando también un sentimiento de esperanza para nuestro estado.

Este himno es de alta manufactura en su composición musical y letrística, y que corresponde a las autorías respectivas a Miguel Lara Vasallo y al poeta José Emilio Grajales.

Es quizá una de las partituras épicas más logradas a nivel mundial. El valor de la semántica de su letra pacifista es único e históricamente fue un llamado a la reconciliación civil, ya que la convocatoria de su creación tenía como objetivo paliar los ánimos de los chiapanecos que a principios del siglo XX estaban divididos e irritados por el cambio de sede de poderes.

El Dr. Hernán León Velasco, es un hombre ilustrado, no sólo sabe de literatura sino que escribe poesía, y sobre música se convirtió en un especialista en Himnos, ya que fue la célula motor para el rescate del Himno a Chiapas cuando éste cumplió 100 años, interés que lo llevó a escribir el Himno de la Universidad Autónoma de Chiapas, letra escrita por Hernán y la música fue resuelta por Efraín Esperilla, propuesta que incide en el fortalecimiento de la identidad universitaria, espero que el nuevo rectorado retome esta valiosa propuesta.

Juan Carlos Cal y Mayor, director del Coneculta-Chiapas, planificó un libro conmemorativo en el 2013, que coordinó desde la Dirección Editorial Marco Antonio Orozco Zuarth, de manera que el producto de este esfuerzo se traduce en un libro que compila lo más relevante sobre el Himno a Chiapas, mismo que fungió como compilador José Luis Castro Aguilar, en este libro participé con un capítulo donde doy cuenta de otras versiones del Himno a Chiapas.

Federico Álvarez del Toro es un hombre mítico con una plena capacidad creadora, y su obra cumple su función primigenia, iluminar el corazón de todos los seres vivos, hasta las hormigas se fortalecen al escuchar las células melódicas que esparce como polen de ciertas flores acuáticas, de esa fuerza creadora está el testimonio que nos ofreció en 1988, con “El Gigante (Versión monumental del Himno a Chiapas)”, y al respecto comenta:

“[…] Varios compositores participaron en el concurso con sus obras y a la fecha siguen apareciendo partituras que estaban destinadas a ser “el himno” y que no alcanzaron a llegar, pero que vale la pena conocer y examinar.

La línea melódica del Himno a Chiapas, escrita por Miguel Lara Vassallo en 1913, se inicia con una corchea con puntillo seguida de una semicorchea en anacrusa posee gran soltura agógica y su fraseo musical fluye en un horizonte de pentagrama que semeja mucho el dramático paisaje que suele caracterizar la tierra de este estado.

Colinas, cordilleras, valles y poderosas alturas de la sierra madre. Si pudiéramos trazar una línea pictórica sobre el pentagrama, siguiendo las alturas obtendríamos una serie fantástica de elevaciones, contrastes, puntos de tensión y reposo o clímax que hacen de esta obra un inapreciable manuscrito musical.

Estrenamos en el Senado de la República con la Filarmónica de la Ciudad de México, el Coro de la Catedral Metropolitana y un solista europeo, una versión monumental del Himno a Chiapas que se llamó “El Gigante”.

Esta interpretación, que tuve el honor de componer y dirigir, fue grabada en vivo y publicada digitalmente, por lo que existe testimonio auditivo de la interpretación en un disco que valdría la pena reeditar, al ser la única versión existente del himno, en formato sinfónico.

La obra recibió el nombre de “El Gigante”, en referencia al sentimiento de que Chiapas es un gigante dormido […].

Ahora bien, si partimos de un supuesto, por ejemplo: que no conocemos el himno a Chiapas y que nos encontramos con él en algún momento, no tardaríamos en descubrir que está hablando de una región, de algún punto en el mapa o tal vez un país y que está haciendo un llamado a la unión, a la fraternidad, lo cual hace suponer que alguna vez hubo unión, y que por algún motivo la unidad se fraccionó, que efectivamente hay dos o más partes que se encuentran en disputa y que pertenecen al mismo Chiapas, entonces nos preguntaríamos ¿en qué momento se dio la división, qué, quién y cómo se ocasionó?, y después nos preguntaríamos ¿por qué crear un himno a Chiapas?, a continuación trataré de esbozar la trayectoria que posiblemente responda a estas interrogantes, comenzando desde la independencia hasta el año de 1913 que se divulga la convocatoria del himno a Chiapas, delineado desde cuatro puntos: 1) La lucha por el poder (1824-1863), 2) Caciquismo (1863-1891), 3) Reunificación (1891-1911), 4) Unificación.

En la historia de Chiapas cada región ha tenido un proceso histórico particular, pero no desligados cada uno de ellos. Desde la conquista española en 1524 hasta la independencia de Chiapas de Guatemala y España en 1821 todo parece haber transcurrido con tranquilidad dentro de la provincia, pero una vez sucedido la independencia y la posterior federación a México, el estado se dividió en grupos y regiones, cada uno con ideas claras de lo que le convenía más al Estado.

En el transcurso de los años de 1821 a 1824 el estado de Chiapas se enfrascó en un debate que tenía principalmente dos vertientes, la primera son aquellos que pugnaban para volver a formar parte de Guatemala y la segunda los que querían federarse a México. Estas divergencias de ideas entorno al Estado llevó a la región del Soconusco en 1823 agregarse a Guatemala. En 1824 se decide finalmente la federación a México, pero la historia de Chiapas ya estaba escribiendo el profundo antagonismo entre dos ciudades, San Cristóbal y Tuxtla.

Durante la primera mitad del siglo XIX, desde el inicio de su vida independiente hasta la intervención francesa, la historia de México se caracteriza por la inestabilidad política y constantes golpes de estado, que se van a manifestar en Chiapas en las luchas internas entre los liberales y conservadores, hay que recordar que Chiapas no participó en la guerra de independencia de México y que consiguió su independencia a consecuencia de esta, por lo tanto no compartía del todo las mismas condiciones históricas, políticas y económicas, aunque si le afectó ya que su mayor comercio lo hacía con México, por esto durante esta primera época Chiapas si gozaba de una unidad estatal y parece que la unión con México desarticuló esta unidad o al menos lo aceleró. Uno de los primeros síntomas de la desarticulación de la unidad es la lucha por el poder, durante la primera mitad del siglo se distingue la presencia de dos personajes don Joaquín Miguel Gutiérrez y don Ángel Albino Corzo, ambos liberales y fuera del grupo de las tierras altas. Los primeros años de vida independiente Chiapas lo vive sin sobresaltos, hasta 1833 cuando Gutiérrez inició la lucha abierta por el poder. El control del estado se encontraba en las manos del clero y de la oligarquía terrateniente de las tierras altas. La construcción del nuevo estado chiapaneco dio origen a las primeras disputas entre la iglesia y las ideas liberales de Joaquín Miguel Gutiérrez, que en 1833 respaldó las reformas liberales del presidente de la república Valentín Gómez Farías, lo que ocasionó que los conservadores de San Cristóbal se revelaran y a Gutiérrez cambiar la sede de los poderes a Tuxtla en febrero de 1834. Este es el primer intento por reconstruir el estado inserto dentro de la política nacional e ideas liberales que va a fracasar con la muerte de Gutiérrez en 1838.

Ángel Albino Corzo culminó la lucha por el poder, primero apoyando al Plan de Ayutla, y en la guerra de los 3 años y por último en la intervención francesa. Durante esta época el máximo representante de los conservadores en Chiapas fue Juan Ortega y durante la intervención francesa en México proclamó el “Plan de Yalmutz”, donde apoyaba la intervención. La lucha por el poder no fue entre San Cristóbal y Tuxtla sino entre el clero y los conservadores coletos. A si vemos en este primer periodo la desarticulación del estado por la lucha por el poder entre dos facciones liberales y conservadores, que dio origen a una serie de enfrentamientos entre el clero y conservador de las tierras altas con los liberales de las tierras bajas y que no era atribuible como una rivalidad entre ciudades o regiones, es de resaltar que las dos únicas ocasiones que hubo una agitación en el estado ocurrieron cuando la iglesia fue atacada por las reformas liberales y no así durante la invasión Norteamérica en 1848.

Siguiendo las características que definen al caudillo en Chiapas a diferencia del contexto nacional, en siglo XX con Calles termina el caudillaje, no se originaron caudillos y los caudillos nacionales no tuvieron el mismo peso que como en otros estados. Es por eso que después de la intervención francesa surgieron en Chiapas caciques, y no caudillos, que controlaron el estado hasta 1891. La lucha por el poder ya no sería abierta puesto que cada caudillo controlaría una región: Julián Grajales en Chiapa, Miguel Utrilla en San Cristóbal, José Pantaleón Domínguez en Comitán, Sebastián Escobar en Tapachula y Pomposo Castellanos en Tuxtla Gutiérrez. El estado chiapaneco se condensa en estos cinco personajes, un pequeño número de familias que representa a todo Chiapas y que en 1914 se va hacer llamar “la Gran Familia Chiapaneca”.

Con la llegada de Rabasa al poder en 1891 el caciquismo se empieza eliminar y el Estado a unificar, es también Rabasa quien traslada definitivamente los poderes, con ayuda de Porfirio Díaz, a Tuxtla Gutiérrez.

Es este periodo de unificación y reconstrucción de sus partes

al todo, es que en 1911 surgió el conflicto por la sede de los poderes del estado entre Tuxtla Gutiérrez y San Cristóbal de Las Casas. Es precisamente este proceso de unificación lo que dota de un nuevo sentido a este conflicto. Después de este periodo de unificación se entra a uno nuevo que es la construcción de la identidad del chiapaneco, dentro de uno de los primeros símbolos se va encontrar el Himno a Chiapas.

De manera que el himno a Chiapas es el resultado del proceso histórico en la historia de Chiapas, esto no quiere decir que haya sido un acontecimiento inevitable y que por las mismas fuerzas de los acontecimientos tenía que suceder tarde o temprano, sino que la creación del himno encuentra explicación en dicho proceso. El estado mexicano culmina su independencia sin estabilidad económica y política, lo que alguna vez fue el gran Virreinato de la Nueva España, la región que económicamente más le reportaba a la metrópoli, después de 1821 tiene que navegar a contra corriente, construir una nueva base económica, construir una nueva nación: darle coherencia e identidad a una región que para estas épocas era inmensa con California, Nuevo México, Texas y la Mesilla que aun formaban parte de México. Son precisamente los acontecimientos ocurridos en el norte del país lo que ocasiona que Chiapas pase desapercibida durante la primera mitad del siglo XIX.