El debate entre las dos candidatas y el candidato a la gubernatura del estado, transmitido el domingo, transcurrió en términos generales como se esperaba: sin despertar en términos generales mayor entusiasmo de la población, porque en parte ya da por hecho quién será el triunfador.

Podría decirse que la confrontación ayudó más a la candidata de Fuerza y Corazón por Chiapas, Olga Luz Espinosa Morales (PRI, PAN y PRD), y a la abanderada de Movimiento Ciudadano (MC), Karla Irasema Muñoz Balanzar, porque no han tenido la oportunidad de realizar actos masivos diarios con miles de personas para dar a conocer sus propuestas.

En cambio, el candidato de la coalición Sigamos Haciendo Historia en Chiapas, Eduardo Ramírez Aguilar, está visitando todos los municipios de la entidad con actos en los que se reúnen miles de personas que tienen la oportunidad de escuchar de viva voz las propuestas que piensa concretar durante el próximo sexenio.

Por si fuera poco, las propuestas de Ramírez Aguilar se difunden profusamente en diferentes medios de comunicación y a través de redes sociales, lo que no sucede con las dos candidatas de la oposición.

Como era de esperarse, el tema de la seguridad fue uno de los que los tres abordaron con mayor intensidad; ellas para criticar y él para plantear lo que como “guardián del pueblo de Chiapas” se propone hacer cuando “asuma” el gobierno el 8 de diciembre, para mejorar la seguridad.

Era de esperarse: el candidato que dará continuidad a la llamada Cuarta Transformación en Chiapas, trae buenas propuestas, entre ellas, la de construir la autopista San Cristóbal-Palenque, un sueño de miles de personas pospuesto desde hace dos/tres sexenios por falta de capacidad para convencer a los dueños de las tierras por las que pasaría la vía o tal vez, incluso, por falta de presupuesto que se justifica con la oposición de comunidades.

Por eso es muy importante el planteamiento de Eduardo Ramírez, de que esa megaobra que sería la más importante de su gobierno, se lleve a cabo como resultado de una consulta popular con los habitantes de las comunidades y cabeceras municipales por donde pasará el trazo.

Además, otro punto muy importante es que la administración de las casetas de peaje estará a cargo de las propias comunidades “para elevarle su calidad de ingreso”.

Asimismo, las gasolineras, los restaurantes, estarán a cargo también de las mismas comunidades para “reivindicar gran parte de ese atraso social que durante décadas se les ha negado”. (Esas ideas, por justas, fueron planteadas en esta “Rotonda Pública” desde el sexenio de Juan Sabines Guerrero, cuando se empezó a hablar del proyecto que no se ha podido concretar).

El candidato, quien se mostró seguro y conocedor de la problemática del estado, manifestó durante el debate y también lo ha comentado en sus actos de campaña, que la obra arrancará el año próximo con 10 mil millones de pesos para lo cual se contratará mano de obra, la cadena productiva de la construcción, la contratación técnica y la profesionalización.

Es de esperarse, pues, que ahora sí, dado el interés del próximo gobernador, esta importante obra se pueda realizar bajo el acuerdo con los habitantes de las comunidades de todos los municipios por los que pasaría el trazo.  

Que bueno que a diferencia de lo que sucede con los candidatos presidenciales, Espinosa Morales y Muñoz Balanzar, se centraron en ofrecer propuestas y evitaron los ataques personales durante las dos horas de participación en el primer debate organizado por el Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana (IEPC), en las instalaciones del Canal 10 del Sistema Chiapaneco de Radio y Televisión. (Por cierto, excelente conducción de los comunicadores Karina Toalá y Miguel Ángel Osio).

Sin meterse en problemas, las dos candidatas optaron por criticar a los Gobiernos Federal y Estatal por la estrategia de seguridad, tema que tenían que abordar en el debate.

Sólo porque la ley lo exige, si no, el IEPC bien podría ahorrarse en esta ocasión la organización de los debates entre las dos candidatas y el candidato a la gubernatura de Chiapas.

Picotazos. El guion de la oposición a nivel nacional se va cumpliendo tal y como ya se había anticipado semanas atrás en esta “Rotonda Pública”: a un mes de las elecciones, la candidata de la derecha, Xóchitl Gálvez asegura que ya alcanzó a la abanderada de Morena, Claudia Sheinbaum. Cuando el 2 de junio esté más cerca dirá que existe un empate técnico o incluso que ya la rebasó, y sus voceros y los medios de comunicación que están de su lado, que no son pocos, empezando por TV Azteca —cuyo dueño se niega a pagar impuesto tal como lo hacen todos los mexicanos—, le harán segunda y tratarán de instalar esa idea en la opinión pública, aunque no tengan bases comprobables para hacerlo y a pesar de que las encuestas la mantendrán abajo, por mucho, en las preferencias electorales. Luego, cuando venga la derrota, dirán que hubo fraude, que fue una elección de Estado y exigirán la anulación de las votaciones, sin ninguna base real también, por lo que tratarán de que las elecciones las resuelva el Poder Judicial de la Federación, que responde a los intereses de la derecha. Fracasarán en su intento, pero para eso es necesario que Sheinbaum obtenga una incuestionable diferencia de varios millones de votos, lejos incluso del ínfimo 0.56 por ciento con el que Felipe Calderón, ayudado por el PRI, se robó la Presidencia de la República en 2006. Ahí serán clave los estados gobernados por Morena, Chiapas entre ellos, para que le aporten el mayor número de sufragios. Fin.