Conservar la Lacandona

Prometedor esfuerzo por conservar la Selva Lacandona. Habitantes de la subcomunidad Nueva Palestina de Ocosingo firmaron un acuerdo para sumarse a acciones de conservación ambiental en esa región. El nuevo subcomisariado del lugar Avelino Vázquez Deara estampó su firma en un documento que contiene los compromisos hechos para lograr el citado objetivo.

El dato fue confirmado por el secretario general de Gobierno de Chiapas, Juan Carlos Gómez Aranda, quien ha estado muy atento al desarrollo de ese tema por la importancia que reviste para el medio ambiente y social del área.

Avalaron el acto autoridades federales y estatales del sector ambiental y representantes de los 18 barrios de Nueva Palestina, respaldaron la Estrategia para el Desarrollo Sustentable que impulsan en forma conjunta el presidente Enrique Peña y el gobernador Manuel Velasco.

Se comprometieron así mismo a promover planes de desarrollo y conservación, a aprovechar en forma responsable los recursos naturales de la región y a evitar la contaminación de suelos y ríos, así como a la recuperación de recursos forestales, evitar el uso de productos nocivos para el medio ambiente y a impedir asentamientos irregulares.

Xóchitl Ramírez Reivich, en representación del titular de Semarnat, Rafael Pacchiano Alaman, elogió la decisión de la comunidad de sumarse al cuidado del medio ambiente y de la voluntad que han mostrado para lograr que Lacandones, Choles y Tseltales, trabajen unidos en la conservación de la Reserva de la Biosfera Montes Azules, uno de los pulmones más importantes de México y Latinoamérica.

La Selva Lacandona está considerada como un importante pulmón del planeta y sirve de hogar para más de 70 especies de mamíferos y más de 300 aves. Está ubicada a unos 300 kilómetros al oriente de Tuxtla Gutiérrez.

Es una región tropical protagonista de tiempos en los que todavía no existía el hombre y posee características especiales, únicas en el mundo.

Comprende un territorio de aproximadamente 1.8 millones de hectáreas, ubicado mayormente en las denominadas Montañas del Oriente de Chiapas, entre los municipios de Las Margaritas, Altamirano, Ocosingo y Palenque,además de los recientemente formados Maravillas Tenejapa, Marqués de Comillas-Zamora Pico de Oro y Benito Juárez.

Siempre serán loables los esfuerzos por conservar su flora y su fauna, como el hecho descrito al principio de este texto.

Peleando por el poder

En serio que el siglo XXI tuvo un inicio de claros contrastes. Hay avances impresionantes en la tecnología y las ciencias, principalmente, con enormes beneficios para la humanidad entera.

Pero el desarrollo humano, entendido como su procuración para convivir mejor entre sus hermanos de especie, parece ir hacia atrás. Se ha llegado a pensar que estamos en la civilización del ocio, pero eso es debatible porque pareciera que estamos en la civilización del inicio de una autodestrucción.

Se ve a leguas eso. Desde quienes viven en continentes lejanos hasta quienes radican en distintas partes de México y en los rincones de Chiapas.

Algunos europeos, asiáticos y africanos, principalmente, están empeñados a diario en cómo inventar formas eficaces, a través de ataques terroristas, para matar conglomerados sociales a una sola vez. Ayer mismo hubo un atentado en París y a cada rato nos enteramos de otros en distintas partes del mundo.

En nuestra querida América tenemos nuestros propios dolores de cabeza.

Desde el dictador Nicolás Maduro que aplasta a marchas multitudinarias que ya no lo quieren como presidente de Venezuela por sus formas oprobiosas de gobernar, pasando por los colombianos que en un referéndum votaron en contra de la firma de un Acuerdo de Paz con las Fuerzas Revolucionarias Armadas de Colombia (FARC) que llevan más de 50 años de acción destructora en ese país y cuyo presidente Juan Manuel Santos había logrado, quién sabe cómo, obtener las firmas de los líderes de esa agrupación de extrema izquierda y que se declaró marxista-leninista desde sus inicios.

Pasando por un pueblo norteamericano que votó en favor de un aprendiz de dictador como lo es Donald Trump quien hoy mantiene en vilo a ese mismo pueblo por tantos agravios proferidos a pueblos vecinos, como México, y a otros lejanos a quienes a amenazado constantemente a sabiendas que tiene en sus manos el poder enorme de una potencia mundial, como lo ha sido siempre Estados Unidos de Norteamérica.

Qué decir de México que tiene hoy en día una docena de exgobernadores acusados de corrupción, de estar involucrados con el crimen organizado o por operar con recursos de procedencia ilícita.

Ese es el rostro que mostramos al mundo: corrupción, suciedad, estigma imborrable en la cara de los presentes y futuros mexicanos.

En Chiapas, esas imperfecciones humanas también saltan a la luz pública a cada rato.

Hay una lucha intestinal por el poder político. Unos no quieren dejar a otros a que hagan su lucha por construir sus propios proyectos. Se lanzan, como petardos venenosos, golpes bajos entre todos.

Las redes sociales, instrumentos propicios para el cobarde anonimato, están siendo usadas para desacreditar al contrario.

Nadie quiere darse cuenta que todos tienen derecho a abrirse caminos en los terrenos que le son de su agrado. Triste, pero cierto.

De boca en boca

La Fiscalía General del Estado (FGE) de Chiapas ha empezado con fuerza su trabajo con su nueva figura que aún está por acomodarse por completo. Derivado de las acciones que encabeza el grupo interinstitucional en materia de seguridad, esa dependencia continúa desplegando operativos de inspección en bares y cantinas en municipios de la región Centro. El objetivo es mantener los índices de seguridad y atender las políticas públicas en materia de prevención del delito que impulsa el gobernador Manuel Velasco Coello.

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