Dueño de discoteca Jet Set admite que plafones del techo "siempre se caían"

El empresario dominicano Antonio Espaillat, propietario de la discoteca Jet Set, reconoció que los plafones del techo del establecimiento "siempre se caían" y que incluso el mismo día del derrumbe, ocurrido el 8 de abril y que dejó 232 muertos, se habían cambiado algunos. En entrevista televisiva, admitió que nunca se evaluó adecuadamente la estructura a pesar de las filtraciones frecuentes, y que los plafones eran colocados por empleados sin supervisión técnica, en un edificio que antiguamente funcionó como cine y donde no se hicieron reparaciones durante tres décadas de operación.


Espaillat, presidente del grupo mediático RCC Media, afirmó que atribuían los daños principalmente al agua de los aires acondicionados y que mantenían el techo impermeabilizado, aunque sin una inspección estructural adecuada. Mientras tanto, la Procuraduría General de la República ha iniciado una investigación formal, y el gobierno anunció la conformación de una comisión de expertos nacionales e internacionales para esclarecer las causas de la tragedia, en medio de crecientes denuncias públicas de negligencia.