Un tribunal federal en Estados Unidos declaró ilegales varios aranceles impuestos por la Administración Trump, lo que ha generado preocupación entre analistas financieros y actores económicos por el aumento de la incertidumbre comercial. Sin embargo, expertos como los de Goldman Sachs y Ebury consideran que este fallo no representa un freno definitivo para el expresidente, quien podría recurrir a mecanismos alternativos, como las secciones 122 y 301 de la Ley de Comercio, para reimponer restricciones sin necesidad de aprobación legislativa inmediata.
Economistas advierten que la decisión judicial podría alentar a los socios comerciales de Estados Unidos a endurecer su postura negociadora, complicando la posibilidad de alcanzar acuerdos antes de la fecha límite del 9 de julio. Mientras tanto, los mercados han optado por la cautela, en espera de conocer la respuesta política de Trump, quien aún cuenta con herramientas legales que podrían sostener su estrategia proteccionista por vías distintas a las ya bloqueadas por los tribunales.