Un juez federal en Massachusetts ordenó al gobierno de Donald Trump facilitar el retorno de un migrante guatemalteco identificado como O.C.G., quien fue deportado a México a pesar de contar con protección humanitaria otorgada por una corte en febrero. El migrante, un hombre gay que había huido de amenazas y violencia en Guatemala, fue enviado a México, donde previamente había sido víctima de secuestro y abuso sexual. El juez Brian Murphy determinó que la deportación violó sus derechos al debido proceso y criticó la actuación del Departamento de Seguridad Nacional por no verificar adecuadamente su temor de regresar a México.
La decisión judicial también ordena una investigación sobre la información falsa presentada por las autoridades migratorias, quienes afirmaron erróneamente que O.C.G. no expresó temor de regresar a México. Actualmente, el migrante se encuentra escondido en Guatemala, tras haber sido rechazado por el sistema de asilo mexicano debido a demoras en el procesamiento y experiencias traumáticas previas. Este caso se suma a otros errores en las políticas de deportación de la administración Trump, como el del salvadoreño Kilmar Abrego García, quien permanece detenido en El Salvador a pesar de una orden judicial para su retorno
