La presidenta Claudia Sheinbaum calificó como inaceptable y fascista la quema de libros ocurrida durante una protesta contra la gentrificación en la Ciudad de México. Desde Palacio Nacional, denunció que un grupo reducido de manifestantes vandalizó el Museo Universitario de Arte Contemporáneo (MUAC), saqueó la librería Julio Torri y dañó mobiliario urbano. "Quemar libros en una institución educativa no puede ser solapado por nadie. Eso solo lo han hecho los fascistas en la historia", sentenció.
Pese a los hechos violentos, Sheinbaum reconoció como legítimas las demandas sociales contra el alza de rentas, y señaló que su gobierno trabaja en coordinación con la administración capitalina para atenderlas. Destacó que la jefa de Gobierno de la CDMX presentó un plan de 14 puntos, que incluye vivienda pública en renta y mecanismos para evitar aumentos abusivos. Aseguró que el gobierno federal respaldará estas medidas para garantizar el derecho a la vivienda sin violencia.