En los últimos años los efectos del cambio climático han alcanzado a las tortugas, debido a que el aumento en la temperatura influye para definir el sexo de los ejemplares, por lo que el personal de la Secretaría de Medio Ambiente e Historia Natural (Semahn) ha tenido que adaptar algunos nidos, puntualizó Adolfo Sarmiento, director de Áreas Naturales y Vida Silvestre en la dependencia estatal.
Lo que han notado, dijo, es que el incremento de los grados provoca que nazcan más machos, por eso el equipo ha realizado trabajos de regulación (con mallas sombras y nidos más profundos); la idea es que exista un equilibrio en el número de hembras y no se generen más problemas de reproducción.
Desde hace varios años se diseñó un programa que permite al personal hacer labores de conservación en los campamentos de Puerto Arista, Boca del Cielo, Chocohuital y Acapetahua. En la actual temporada de anidación se han liberado 282 crías.
Las costas de Chiapas reciben a cuatro especies de tortugas: la laúd, golfina, carey y la prieta, sin embargo, no todas anidan. Algunas solo arriban en una etapa juvenil para el tema de alimentación.
Labor
El personal de la Semahn ha levantado cinco mil 433 nidos que contenían 493 mil huevos. Además del impacto del aumento de la temperatura, las zonas cercanas a los campamentos han registrado mar de fondo, es decir, no es un problema que solo afecte a las especies, también genera un impacto para las instalaciones cercanas que podrían perder su línea de playa.
El problema con estas especies, comentó Sarmiento, se deriva del saqueo de los huevos (aun y con todos los riesgos que hay para la salud y en la vía jurídica) y también del consumo de la carne. Para entender la importancia de la conservación, una tortuga alcanza la adultez sexual en un promedio de 10 años; de mil huevos que ponen, una de ellas apenas llegará a esa etapa.
Además, las hembras regresan a las mismas playas donde nacieron; por eso, remarcó el director de Áreas Naturales Protegidas, se tienen que cuidar estos espacios que muchas veces son turísticos. Se espera que al final de la temporada se pueda liberar entre 300 y 350 mil crías. Por último, Sarmiento recordó a la población que en los campamentos existe información a la que pueden acceder para que conozcan la importancia de cuidar a las especies.