Logro histórico del HEP; dos menores volverán a escuchar

Calificado como un logro histórico, un grupo multidisciplinario del Hospital de Especialidades Pediátricas (HEP) en Tuxtla Gutiérrez realizó la colocación de implantes cocleares bilaterales a dos menores de edad (es un dispositivo eléctrico que convierte las ondas sonoras en impulsos que se envían al oído interno y después al cerebro), lo que permitirá que estos infantes, de cuatro y dos años, recuperen su audición.

Rigoberto García López, otorrinolaringólogo en el HEP, informó que la operación fue gratuita y funciona a través de un programa que ha impulsado la Dirección; todo se hizo de forma gratuita, sin embargo, en una clínica particular el precio oscila en un millón de pesos por cada aparato.

“Es un verdadero apoyo a las familias, ya que estos niños son beneficiados con un oído que les permite captar las ondas sonoras, llevarlos a través de un impulso hacia el oído interno”, después al nervio auditivo para dirigirse al cerebro.

Funcionalidad

Todo funciona por medio de electrodos que se colocan en la parte interna, debajo de la piel del implante coclear. La primera fase de la intervención se hizo, lo que viene es la colocación de la parte externa (llevará cuatro semanas) para activar los dispositivos.

La otra parte se vincula con una rehabilitación auditiva, la cual se realizará con la intervención de especialistas. Para que una persona pueda escuchar después del procedimiento, refirió García López, dependerá del momento en que se pierda la audición.

Los niños que son beneficiados a temprana edad (entre uno y dos años) tienen mayor posibilidad de integrarse en la parte auditiva y social. El implante interno que se coloca dura para toda la vida del paciente; lo que sí puede romperse (dependiendo la actividad del menor) es el aparato externo, pero se puede cambiar y tiene un costo bajo.

Dictamen

El otorrinolaringólogo explicó que un grupo de especialistas, integrados en un comité, son los que deciden qué infantes deben ir a cirugía. La intervención quirúrgica tiene algunas complicaciones que se pueden asociar con la parálisis facial, salida del líquido cefalorraquídeo o infección de los tejidos blancos, no obstante, la colocación se hace por conocedores del tema.

Los dos menores de edad, uno de Villaflores y el otro de Tuxtla Gutiérrez, fueron diagnosticados con sordera congénita bilateral, es decir, perdieron más del 90 % de los decibeles y con el 10 % no tienen la posibilidad de que funcione solo un auxiliar, por eso la opción fue el implante coclear.