Advierten por alza de matrimonio infantil en México

Mitontic figura entre los 10 municipios del país con mayor porcentaje de mujeres de 12 a 17 años casadas y unidas. La directora del Centro Interdisciplinario para el Desarrollo Social (Cide), Alicia Vargas Ayala, advirtió en el encuentro que realizó el Centro de Investigaciones Multidisciplinarias sobre Chiapas y la Frontera Sur (Cimsur), “Matrimonios y uniones ¿infantiles, tempranas o forzadas?”, que “a pesar de que el matrimonio infantil en el territorio nacional está prohibido, sigue aumentando”.

La integrante de Tejiendo Redes de Infancias en América Latina y el Caribe, resalta con datos estadísticos formales que la mayor cantidad de niñas de 12 a 17 años casadas o unidas durante el año 2020, habitaban en el Estado de México, Chiapas, Tabasco y Veracruz.

Advierte que “cuando vamos al desagregado para identificar las localidades específicas, los municipios del país que presentan mayor porcentaje de mujeres de 12 a 17 años casadas o unidas, fueron La Pe, en Oaxaca, y Mitontic, en Chiapas, en este último con el 19.4 % de las adolescentes en tales condiciones”.

La activista advierte que a nivel mundial el matrimonio infantil ha disminuido paulatinamente, sin embargo, en América Latina y El Caribe “sigue siendo una práctica que no ha disminuido en los últimos 25 años”.

Y agregó que “resulta particularmente vulnerable por los patrones de discriminación y razones de género que existen en la región, además al concentrarse en muchas mujeres provenientes de hogares en situación de pobreza, de bajo nivel de desarrollo humano y en comunidades indígenas o afrodescendientes”.

Regiones indígenas

La situación se complica en las regiones indígenas, donde bajo la bandera de los usos y costumbres se vulneran derechos económicos, sociales y culturales. Desde las organizaciones sociales, dice, los programas dirigidos hacia la protección de las infancias consisten en el diálogo con los pueblos desde el respeto y un enfoque de interculturalidad.

Y advierte que el deber del Estado mexicano es tomar las medidas más enérgicas para combatir el matrimonio forzado y la venta de mujeres, de niñas y adolescentes.

“Cuando decimos medidas enérgicas no nos referimos a actos de violencia, nos referimos a que tiene toda la intensidad, fuerza y voluntad de convertirse y ejercer su posición como garante de derechos, accionando al respecto e identificando las pautas culturales que reproducen esta práctica”.

Esto a través de la inversión en el mejoramiento en la vida, incluyendo una educación pertinente y sólida, mejorar los servicios de salud, alternativas de empoderamiento para las mujeres y apoyo para la manutención e impulso para el ingreso a la familia.