Las alteraciones del pie, ya sea congénitas o como consecuencia de otro problema estructural óseo, no son atendidos de forma correcta, lo que genera mayores problemas a largo plazo, como dolor y molestias en otras partes del cuerpo, indicó Gerardo Velázquez Hernández, médico cirujano.
Padecimientos
El doctorado en medicina osteopática y una especialidad en biomecánica clínica, comentó que el pie plano, pie cavo o pie pronado, se definen como alteraciones y pueden ser estructurales y congénitas, mismas que se detectan desde temprana edad, o bien, secundarias a otro problema.
Cuando esto ocurre se requiere de un análisis biomecánico, que sirve para estudiar la relación de la huella plantar del pie en consecuencia a otras estructuras óseas, como la cadera, la rodilla, los tobillos, la columna o incluso el cuello. “Todo lo que ocurre en estas áreas modificará la huella plantar”.
Falsas soluciones
En la mayoría de los casos, los médicos suelen enfocarse a la deformidad colocando una plantilla o un calzado especial, pero eso no soluciona el problema porque condiciona a que el pie tenga esa alteración presente.
“Todos los pacientes van a requerir el uso de plantillas, pero en un momento adecuado, el personal médico debe saber identificarlo, aunque eso no pasa, porque no hacen los estudios especializados necesarios”, precisó.
“Por ejemplo, en el caso de los niños, cuando les recetan el uso de zapatos ortopédicos, si está bien indicado tendrá un efecto positivo”, consideró.
Consecuencias
Mencionó que de no atender de forma correcta las alteraciones del pie las consecuencias aparecerán en la adolescencia o adultez, como hernias discales, desgastes articulares en rodilla, cadera, rectificaciones en las cervicales y otras más.
En la mayoría de los casos también, al presentarse una hernia discal como resultado de una alteración del pie, se atiende, pero no se pone atención a la causa. “La realidad es que muchas veces se dan por una mala pisada”, sostuvo.
Lo ideal es buscar a un especialista en biomecánica, que en Chiapas desafortunadamente hay muy pocos; en su caso cuenta con un consultorio al sur-poniente de la ciudad, en el barrio San Francisco, siendo uno de los tres médicos que maneja el estudio baropodometría.
Alarmas
Si los papás observan que su hijo pequeño sufre caídas recurrentes o tropiezos, es necesario acudir a consulta, para realizar dicho estudio que sirve para estudiar la huella plantar de forma detallada. “Desafortunadamente no hay una cultura de prevención para estos problemas de salud ósea”.
Reiteró que cuando hay un problema como una hernia discal se requiere de tratamientos específicos y personalizados para cada cuerpo, se debe analizar su condición general, no se puede atender de forma genérica, solo con plantillas o masajes.