El manejo municipal de aguas en Chiapas está transitando hacia la regularización, luego del Plan Nacional Hídrico anunciado por la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum, producto del cual ayuntamientos de la entidad están buscando reactivar las plantas de tratamiento.
Retos
No obstante el principal reto es el elevado cobro de energía eléctrica por parte de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para operar las plantas, además del bajo ingreso de los municipios por concepto de suministro de agua potable.
Toda vez que las tomas clandestinas y la falta de pagos de la ciudadanía por el servicio de agua potable, es una constante manifestada por los ayuntamientos, confirmó Marco Antonio Coello, titular de la Dirección de Administración del Agua, de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Explicó que no se tiene una cifra exacta pero municipios de diversas regiones de Chiapas ya iniciaron los trabajos para rescatar, operar y en algunos casos construir plantas de tratamiento de aguas.
No obstante, se espera que en el siguiente ejercicio presupuestal pudieran tenerse importantes avances, en la medida también que se incrementen los pagos ciudadanos por el servicios de agua potable, dijo el titular de la Conagua.
Contexto
En ese sentido, cabe recordar que al amparo de la normatividad, los ayuntamientos de Chiapas eligieron pagar unos 73 millones de pesos (mdp) anuales a la Comisión Nacional del Agua (Conagua), en multas que “autorizan” desechar aguas negras a los ríos para redireccionar recursos federales en aciones de impacto político-electoral.
Y es que de los 124 ayuntamientos en Chiapas, solamente uno tiene funcionando plantas de tratamiento en apego a la normatividad; el resto paga entre 90 y 200 mil pesos por concepto de multas directamente a la dependencia.
Esto representa un ingreso promedio trimestral para Conagua de 18 mdp, anualmente 73 mdp.












